Maltrato a inocentes en la España próxima.

Llevan varios días los de 20minutos hablando de los malos tratos a las niñas en los preventorios dirigidos por la Sección Femenina. Me consta por informantes muy próximos que todo lo que se cuenta ahí es real,  pero lo que me tiene de verdad asombrado es la inquina de la gente que contesta las informaciones a través de los comentarios. Cualquiera que entre en la información puede comprobar el grado de impiedad, crueldad, intransigencia e ignorancia que destilan esos exabruptos.

Claro que no es de extrañar, porque el franquismo no ha sido juzgado como se merece. La modélica transición se basaba en olvidar el odio fratricida, lo cual puede ser algo muy positivo, y también en perdonar los crímenes del régimen anterior. Pero perdonar significó aceptar que aquí no había pasado nada. De hecho toda la población estuvo en mayor o menor medida comprometida con el franquismo. Por ejemplo, uno podía estar en contra de los límites a la libertad sindical del régimen, pero podía aceptar como muy conveniente que se torturara a los delincuentes en las cárceles para que confesaran sus delitos. De alguna manera todo el mundo asumía el estado de cosas franquista, con lo que una inmensa mayoría de españoles aceptó en un grado u otro el franquismo como un régimen, al menos en algunos aspectos, tolerable.

No romper con esto tiene unas consecuencias gravísimas y suponen una excepción española que no se ha dado en otros países, cuando menos en nuestro entorno europeo. En el pecado llevamos la penitencia que consiste en que tenemos una derecha “infiltrada” de franquismo hasta la médula y con unos planteamientos políticos que son a menudo vergonzosos. ¿Quién no ha escuchado en las charlas de café eso de que este tema lo arreglaba yo con dos guantazos bien dados y cosas de ese estilo?