Vistas de página en total

martes, 18 de septiembre de 2012

¡Gibraltar español!



Cuando se constituyó el actual gobierno, recuerdo que lo primero que le escuché decir al nuevo Ministro de Exteriores fue: “¡Gibraltar español” Un grito nacionalista que se hizo popular entre los fascistas que eran jóvenes en los años sesenta y setenta y que fue como su respuesta a la gran marea que supuso en Europa el mayor francés del 68. Era una forma de ser fascista y “chic” al mismo tiempo, era un grito de guerra como el de “patria o muerte” que decían los héroes cubanos nacionalistas, (por entonces no eran aún los guardianes de la ortodoxia comunista). Así que cuando se lo oí decir al Sr. García Margallo quedé un poco atónito, como si volviera a revivir aquellos años.
Pero no. La derecha española ha evolucionado y ya no son esa caterva fascista que fue. Ahora son liberales, como Romney o como la dimitida lideresa de Madrid. Véase si no lo que hacía el actual ministro de medioambiente, antes de dirigir el ecologismo ministerial. Resulta que el señor Arias Cañete, tenía montada una empresa que se dedicaba a comprar combustible a gasolineras flotantes asentadas en el estrecho para venderlo en Ceuta, combustible que compraba más barato. No conozco las condiciones en que se realiza este comercio, pero a uno, en su ignorancia, le recuerda al contrabando, aunque en la Unión Europea ya no existe contrabando porque es lo único que se ha conseguido. ¿Será la UE una asociación de contrabandistas? No nos metamos en este berenjenal. Lo que sí es cierto de este negocio es que había sido frecuentemente denunciado por los activistas medioambientales por los muchos vertidos que produce. 

¡Vaya antecedentes para un ministro de medioambiente!

¡Coño, Cañete!

No hay comentarios: